Se considera Atención Temprana al conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tienen por objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastornos en su desarrollo o que tienen el riesgo de padecerlos. Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del niño, han de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientación interdisciplinar o transdisciplinar.
A quién va dirigido:
La Atención Temprana va dirigida a niños/as de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, y tiene como objetivo dar respuesta lo antes posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con alteraciones del desarrollo o riesgo de padecerlas.
Pueden ser sujetos de intervención en Atención Temprana:
De esta forma, la Atención Temprana tiene un enfoque tridimensional orientado a potenciar diferentes aspectos en cada una de sus tres dimensiones.
- En el niño: potenciar atención, memoria, habilidades sociales, motricidad, autonomía personal...
- En la familia: fomentar el apoyo, la participación, la colaboración y el aprendizaje de habilidades de ayuda del niño/a.
- En el entorno: aumentar y favorecer la integración y adaptación del niño/a.
Qué objetivos persigue:
Los objetivos fundamentales son la integración de la persona en la familia, la escuela y la sociedad, así como el aumento de su autonomía personal, potenciando sus capacidades y trabajando sus dificultades. De esta manera, se pretende aumentar su capacidad de desarrollo, permitir que tenga el mayor bienestar posible y favorecer la consecución de sus objetivos de vida o los de sus familiares (en su caso). Para esto, una parte esencial de la terapia consiste en adaptar la intervención a las características de cada niño/a.